¿Qué son exactamente? ¿Por qué motivos aparecen en nuestra piel? ¿Cómo podemos prevenirlas?
Un mar de dudas nos atrapa cuando deciden llegar para quedarse en nuestras rodillas, brazos, abdomen o glúteos. Te contamos todo lo que necesitas saber sobre las estrías.
Si has entrado a leer este post, estamos seguros de que sientes curiosidad por resolver todas estas incógnitas acerca de esas cicatrices que acaban de aparecer por primera vez en tu piel o que llevan varios años contigo.
Las estrías acompañan a las mujeres, y en menor medida a los hombres, por diferentes etapas de su vida. Los expertos confirman que aparecen aproximadamente entre un 27 y un 35% de los adolescentes (entre 10 y 16 años, y 2,5 veces más en mujeres que en hombres) (1)
¿Qué son exactamente las estrías?
Las estrías son atrofias cutáneas en las que se percibe un degradamiento de las fibras elásticas de colágeno y elastina. Son visibles por el adelgazamiento y hundimiento localizado de la epidermis. Por lo general, estas lesiones atróficas, lineales o en bandas se presentan en áreas de grandes pliegues cutáneos.
Podemos diferenciar dos tipos de estrías: las rojas y las blancas. Las primeras son las que aparecen en el inicio. Tienen ese tono a consecuencia de un aumento de la vascularización. En esta fase son más fáciles de tratar, puesto que están cicatrizando y cuando este proceso está muy avanzado, pasan a tomar un color blanco nacarado. En ese momento se vuelve complicado atenuarlas.
¿Por qué motivos aparecen en nuestra piel?
Como hemos comentado, las estrías pueden surgir en diversos momentos de la vida y por múltiples causas. Por lo general, aparecen cuando hay una combinación de crecimiento corporal rápido, bien en volumen, como es el embarazo o el aumento de peso, o en longitud como ocurre en la adolescencia junto al cambio hormonal.
También es frecuente su aparición en condiciones médicas como el uso prolongado de corticoides vía oral o en forma local sobre la piel. Además, existe una predisposición genética, es decir, que en algunas familias se pueden observar más que en otras.
Consejos para prevenir las estrías de manera eficaz
Muchos tratamientos farmacológicos y dermocosméticos prometen eliminarlas, la realidad es que tienen una eficacia muy baja, hacerlas desaparecer totalmente es una misión prácticamente imposible puesto que son cicatrices del tejido conectivo de la dermis y cuando aparecen se quedan para siempre. Nuestra recomendación es que pongas todos tus esfuerzos en intentar prevenirlas.
¿Qué debes hacer para conseguirlo?
1 – Mantén los niveles de colágeno y elastina elevados
Opta por aceites vegetales cargados de vitamina A, responsable de restaurar los tejidos dañados, aumentar la renovación celular y favorecer el mantenimiento de la estructura de la epidermis, interviniendo en el control de la proliferación de las células.
En La Malvaflor puedes encontrar nuestro famoso Aceite corporal natural ANTI-ESTRÍAS, un complemento perfecto para estimular la producción de colágeno que además te ayuda a prevenir y reducir las estrías del embarazo o las debidas a cambios repentinos del volumen corporal de tu cuerpo. Te recomendamos utilizarlo de manera constante durante todo el año. Estos son 3 de los aceites que lo componen:
- Aceite de sacha Inchi. Esta semilla milenaria tiene su origen en la Amazonía Peruana, posee gran cantidad de antioxidantes, vitamina A y vitamina E. Su extraordinario poder regenerador actúa en las capas más profundas de la piel actuando como un cicatrizante natural. Su alto contenido en ácidos grasos y proteínas proporcionan la hidratación, nutrición y elasticidad perfect
- Aceite de aguacate. Este potente ingrediente cargado de omega 3, 6 y 9 y vitaminas como la A y C, lo convierten en el perfecto aliado para prevenir y tratar estrías, arrugas y celulitis, puesto que ayudan en la metabolización del colágeno, proteína esencial que le da firmeza a la piel.
- Aceite de rosa mosqueta: El mejor amigo de las futuras mamás. El pasado invierno te contamos los beneficios de la rosa mosqueta para tus labios, donde destacamos su poder regenerador y reparador, concretamente, su alto contenido en vitamina A ayuda a una correcta cicatrización de la piel y también regula la producción de melanina.
2 – Lleva una dieta basada en zinc y vegetales ricos en vitamina A, C y D
El zinc es un mineral esencial para el correcto funcionamiento del sistema de defensas del cuerpo, para el crecimiento de las células y también cumple un papel fundamental en la cicatrización de heridas. Lo encuentras en las semillas de calabaza, el chocolate negro o el germen de trigo.
Mantén una dieta sana y equilibrada incorporando frutas y verduras (zanahorias, espinacas, huevos, pescado, kiwi, naranja…) que aporten vitaminas y minerales necesarios para que estimulen la producción de colágeno y nutrir la piel desde dentro.
3 – Bebe mucha agua y haz ejercicio
Ya lo sabes, es una combinación básica y necesaria para mantener estable la elasticidad de tu piel. Bebe abundante agua para conseguir una piel hidratada desde el interior. Mínimo dos litros de agua, infusiones o zumos naturales al día.
Para prevenirlas también se tiene que seguir una actividad física de bajo impacto todos los días, y evitar estar mucho tiempo en la misma postura, ya sea de pie o sentado.
4 – Evita adelgazar o engordar bruscamente siempre que esté en tu mano
No te aconsejamos seguir dietas milagro con las que se baja de peso rápidamente, ayudan a su aparición y además no son buenas para la salud. Lo más recomendable es mantener un peso equilibrado y constante.
Durante el embarazo es difícil evitar su aparición debido a la expansión del abdomen y a los cambios hormonales. Se recomienda reducir el consumo de sal, dulces, bebidas con gas y alimentos ultraprocesados.
Esperamos haber resuelto tus dudas en torno al mundo de las estrías. Consideramos que hay mucha desinformación y es fundamental conocer la realidad
¡Por cierto! Si tienes la suerte de no tener estrías y te has enamorado de la combinación de aceites vegetales de nuestro aceite, te gustará saber que lo puedes utilizar sin problema, en La Malvaflor lo utilizamos a diario y no nos puede gustar más 🙂
¡Muchas gracias por acompañarnos!
Ref (1) Ayala, Ana. Las estrías. Etiología, clínica y tratamiento. Elsevier. Vol. 19. Núm. 2. páginas 74-83 (Febrero 2000)