Esta esponja, utilizada por los japoneses durante más de 1500 años, está hecha a base de las raíces de una patata de origen asiático denominada Konjac o Konnyaku, compuesta por un 97% de agua y un 3% de glucomanato. Se trata de una esponja 100% natural, sin conservantes ni pigmentos artificiales. Debido a su naturaleza alcalina, posee una gran capacidad de limpieza, a la vez que elimina células muertas y mejora la barrera protectora de la piel, equilibrando su pH. Limpia los poros en profundidad, elimina puntos negros y el exceso de grasa, hidrata y calma.
Esponja Konjac arcilla blanca
6,50€
Pieles secas o envejecidas.
Esponja konjac de arcilla blanca: con un 90% de raíz de konjac y un 10% de arcilla blanca, esta esponja está indicada para pieles secas o envejecidas, aportándoles minerales y otros nutrientes.
Uso: es importante humedecer la esponja en agua caliente o tibia, después escurrir y masajear el cuerpo con movimientos circulares para activar, exfoliar y refrescar. En un principio, no es necesario añadir ningún otro producto, pero combinada con jabón natural potenciarás aún más su efecto sobre la piel.
No hay que secarla, debe hacerse de forma natural, en un lugar ventilado. Es normal que la esponja se endurezca, recuperará su estado normal una vez se vuelva a humedecer. Conservarla en el frigorífico puede alargar su vida útil.
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Esta esponja, utilizada por los japoneses durante más de 1500 años, está hecha a base de las raíces de una patata de origen asiático denominada Konjac o Konnyaku, compuesta por un 97% de agua y un 3% de glucomanato. Se trata de una esponja 100% natural, sin conservantes ni pigmentos artificiales. Debido a su naturaleza alcalina, posee una gran capacidad de limpieza, a la vez que elimina células muertas y mejora la barrera protectora de la piel, equilibrando su pH. Limpia los poros en profundidad, elimina puntos negros y el exceso de grasa, hidrata y calma.